Y resulta que no importa tanto si fuera está nublado, o si la penumbra
abrazó de nuevo al mundo…
No sucede nada si no hay nadie en las aceras…
No asusta tanto el silencio…
De tanto soñar los sueños que nunca llegan, llega la rendición…
temeraria rendición...que rompe los sueños que quizá estaban ya llegando...
temeraria rendición...que rompe los sueños que quizá estaban ya llegando...
¿Pero qué importa si llueve, o si no reconozco tus pasos, qué más da el
invierno y las horas…?
¿Qué problema hay con esa imagen que se pierde en la memoria…? Parecía tan
sólida ayer…mas cuán rápido hoy se evapora…
Sin embargo, y a pesar de todo...no importa…
Nada es importante en esta oscuridad de sombras confundibles, sustituibles,
perecederas…
Nada sucede en realidad…y nada importa…
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