Y la vida me
sorprendió mientras dormitaba en mi existencia plana…mientras deambulaba por
mis días inertes, mientras flotaba en la inercia de horas predecibles…
Se detuvo y
preguntó mi nombre…
Me sorprendió
enormemente, pues jamás creí tenerlo…
Sin embargo lo
tenía y por primera vez lo pronuncié…
Tímidamente…al
principio apenas fue un leve sonido que se disolvió a un paso de mis labios…como
si se tratase de algo prestado…
Pero me supo tan
dulce que quise repetirlo…
Y al escucharlo
de nuevo, lo reconocí mío…
Y al hacerlo, mi
nombre dio forma a mi rostro y a mi voz…
A mis recuerdos
y a mis sueños…a todos mis momentos…
Mi nombre era mi
historia y mi futuro…
Mi nombre era
yo...
En ese momento la vida, satisfecha, me besó en la frente…
Y tal como había
llegado, se fue…
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