A veces, sin esperarlo, vemos la parte
oscura de las cosas…
Sin buscarlo ni haberlo sospechado antes
nos hallamos en el lado equivocado de la luna…
Asusta…
Un paso en falso puede conducirnos al
abismo, una ráfaga de viento puede arrebatarnos el mapa de las manos...
El suelo bajo nuestros pies se
resquebraja, y las certezas que nos pertenecían hasta entonces huyen por una
ventana que surge de la nada…
Puede llegar un día gris de aire viciado, una mañana
espesa y húmeda…
De vez en cuando ocurre…en medio de la
primavera un día de tiniebla…
Pero solo hay que vivirlo…solo hay que
dejar que pase, sin interrumpirlo…que siga su camino…
No es más que un día, no hay
peligro…
¡Qué bonita reflexión! Pues sí, a veces ocurre, pero como tu dices hay que dejarlo pasar. Como dice un refrán: mañanita de niebla, tarde de paseo ;-)
ResponderEliminarBesos!!!