sábado, 18 de mayo de 2013

Mundo interior

Nunca había pensado que debo empezar por dentro. Me explico: por dentro de mí misma.
Jamás se me hubiera ocurrido que es mi interior lo que debo arreglar para que se arregle el exterior.
Abres los ojos y ahí estás, cada mañana, diciéndote a ti misma que no lo lograrás; que eres demasiado tímida, demasiado mayor, demasiado perezosa, que no tienes suficiente tiempo…
Cada despertar el mismo sermón, interiorizado en cada célula a fuerza de repetirlo; y antes de salir a la calle ya has decidido que nada sucederá. Que hoy tampoco cambiará tu mundo.
Nunca tienes tiempo para felicitarte por las cosas que has logrado, pero sí para castigarte por las que no. A diario te olvidas de tus sueños, pero jamás sales de casa sin cargar en tu espalda esa mochila llena de culpas.
Qué difícil es vivir así, qué terrible…
Buscamos en ojos ajenos el perdón, la comprensión, el amor…pero buscamos donde no está…porque somos nosotros quienes debemos perdonarnos y comprendernos…somos nosotros quienes debemos amarnos.
Eres tú quien debe mirarse al espejo y decir: “¡Me encanta ser yo!”.
Y en ese preciso y precioso instante la vida entrará a borbotones y todo empezará a cambiar…

1 comentario:

  1. ¡Hola Ascensión! he recibido un premio en mi blog, y yo lo debo de conceder a 11 blogs que más me gustan, he pensado en tí. Si quieres recibirlo pásate por mi blog y verás las instrucciones.
    ¡Besos!

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