Por casualidad aquel libro había caído en mis manos
mientras curioseaba en las estanterías de la biblioteca, retrasando
inconscientemente el tedioso momento de ponerme a estudiar.
Había llamado mi atención por su cuidada
encuadernación en cuero rojo, y por sus llamativas letras doradas en el lomo,
que rezaban así: “Leyendas reales que te quitarán el sueño”.
Mi natural atracción hacia todo lo misterioso hizo
el resto, y en apenas dos segundos estaba cómodamente sentada, con el libro
abierto sobre la mesa, ávida por conocer todas aquellas historias, y relegando al
olvido mi propósito inicial de estudiar para mi examen de historia.
Sin embargo, en un primer momento, aquellos relatos
no despertaron en mí más interés que otros tantos que había leído con
anterioridad, pues hablaban de apariciones fantasmales, abducciones
extraterrestres y cosas por el estilo…nada nuevo…
Empecé a pasar las hojas distraídamente, bastante decepcionada;
“más de lo mismo”, pensé.
Pero entonces un título captó de nuevo toda mi
atención: “¿Vampiro en los bosques de Evenon?”
Consulté un mapa rápidamente, aquel lugar me
resultaba familiar…efectivamente, se encontraba a unos 500 kilómetros de allí, junto a un pequeño pueblo de apenas 300
habitantes, llamado Jorspen.
“Bien, no
está demasiado lejos”, me dije,
sintiendo un escalofrío.
“¿¡Un
vampiro!?”, repetía una y otra vez
para mis adentros.
Mis manos temblaban al compás de mi acelerado
corazón, al tiempo que el miedo y la emoción se alternaban en mi mente, en una
caótica batalla.
Advertí que el relato estaba firmado por un tal
Gael Nolan. Anoté su nombre en un trozo de papel que guardé con celo en el
bolsillo de mi pantalón, y salí de la biblioteca precipitadamente.
Y así fue como empezó esta increíble historia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario